Amigos les compartimos un pequeño relato de la Parroquia Zámbiza.📃🗞📰
MUCHA GENTE
A varios kilómetros de la parroquia Zámbiza, se reúnen varios grupos de motociclistas; en donde, Ronny Chaves, “comandante primero”, es el líder de la pandilla. Así es apodado por su grupo. El decidió viajar por todas las autopistas, carretera y las vías nuevas que actualmente se construyó en la ciudad de Quito, para trasladarnos de forma más rápida en toda la ciudad.
Chaves el pasado octubre del 2018 pasó por la avenida Rio Coca, camino a Nayon se quedó en las pistas de motos ubicadas en redondel del Ciclista. En donde escuchó a varias personas de ese lugar decir que la parroquia de Zámbiza tiene un desagradable olor como a “perro muerto”. Así comento la señora del bar, de las pistas de moto.
Chaves, y su fama de tener una vida bohemia con todo el grupo, decidió ir a Zámbiza a pesar de cualquier tipo de comentario.
El “comandante primero” quería saber de forma directa si lo que había escuchado era cierto o no, así que estando ya en el lugar expresó: “Zámbiza, es un lugar que no es tan visitado, por las malas referencias que tiene dicha parroquia. El olor en ciertas partes es desagradables, pero sus carreteras no están en mal estado y tienen muchas señales de tránsito para guiarnos, como nosotros siempre andamos en moto si nos ayuda mucho esto.”
José Tener, segundo jefe de la banda mencionó: “los bosques que tiene Zámbiza, puede convertirse en zonas para motocrós, para eventos, para bici, cuadrones etc. Ya que los bosques de Zámbiza están ahí sin ser utilizados para una buena causa. Por lo tanto, lo que yo pude observar es que no todo lo que la gente comenta es verdad."
Zámbiza nos ofrece: complejos turísticos, canchas sintéticas, balnearios del coliseo, gimnasio, la iglesia parroquial que está en remodelación, parque central y las actividades al aire libre. Yo en lo personal vendría los fines de semana a esta parroquia con mi familia para tener un momento de descanso de la ciudad y así disfrutar de un ambiente calmado”.
Muchas veces los rumores de la gente acerca de las parroquias, quizá por algún tipo de mala experiencia hace que las demás personas que están a su lado y escuchan esto, creen una imagen distinta a la realidad, en este caso la señito del bar, pero lo bueno es que nuestro comandante primero fue valiente y por esa valentía descubrió un tesoro inimaginable en Quito.
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